¿Por qué los que estudian no saben estudiar?

“Algunas hipótesis de lo que está sucediendo…”

Cuando de problemas para estudiar se trata lo que se escucha es esto:
-“No tiene método de estudio”-….-”No sabe estudiar…no le enseñaron en la escuela cómo hacerlo” -…-“El problema es que se bloquea en las pruebas y deja la hoja en blanco”- …-”No se entiende…en casa sabía todo, la maestra particular lo dijo, pero al llegar al examen…como si nunca hubiera visto el tema”-….-”No se organiza…prácticamente no tiene carpeta”-…-”Llega a casa y no hace nada….sólo chatea o mira televisión”-… -“Cuando llega el día del examen se acuerda esa mañana…y entonces ya no estudió…y bueno…le va mal”-…- “A última hora del domingo se acuerda del mapa que hay que comprar o que le pidieron algo para geometría y hay que salir como loco a pedir a un vecino”-…-” No presta atención en clase, la maestra dice que vuela todo el tiempo”-…- “Se levanta, habla con el compañero, pasea por el aula, cada cinco minutos hay que llamarle la atención”- y algunas más…

El factor común en todas estas afirmaciones es el mismo….NO HAY CONEXIÓN CON EL APRENDER.
Para entender mejor este concepto, tenemos que pensar en un proceso que surge desde dentro del niño o del adolescente y no que proviene desde fuera de los mismos. Cuando a partir de la mejor voluntad nuestra y del docente les proponemos a los alumnos instancias de metodología de estudio, les estamos ofreciendo un elemento nuestro, que sale de nuestro interior, que lo tenemos claramente procesado y apropiado como legítimo aprendizaje y que desde luego, nos resulta de muchísima utilidad. Pero muchas veces, en aquellos a los que se los estamos transmitiendo, funciona como un elemento externo, y que de no existir una clara necesidad interna, difícilmente logre el cometido esperado: que el método le sirva a los fines de aprender. La enseñanza de una metodología de estudio es eficiente cuando el que la recibe, está conectado con el aprender.
Parecería entonces que para trabajar con las dificultades de estudio tenemos que partir del concepto de “conectarse con el aprender” como requisito básico no sólo para que una metodología de estudio sea eficiente sino, fundamentalmente, para que el hecho educativo se logre.
Pero ¿cómo entendemos el concepto de conexión con el aprender? El mismo hace referencia a las nociones psicológicas y cognitivas de lo que significa el aprendizaje. Este se inicia frente a un estímulo, que produce una modificación en la interioridad de la persona proceso que se llama asimilación. La persona genera luego mecanismos internos de acomodación a ese elemento que ingresó y finalmente surge lo que se denomina adaptación mediante la cual el individuo se integra al medio. Finalmente a través de la generalización, es capaz de utilizar el elemento incorporado (aprendizaje) en diversas situaciones.
Todo este proceso de conexión y adquisición de aprendizajes es hoy bastante diferente al de años atrás. En la sociedad actual existe una hiperestimulacion de los sentidos que genera una actitud diferente en niños y jóvenes. Hoy es posible verlos estudiando, escuchando música y con la computadora o la televisión al mismo tiempo. De aquí la necesidad de modificar algunas cuestiones vinculadas al proceso educativo que aún sigue manejando parámetros de otras épocas. La educación de hoy requiere generar nuevos intereses, integrar aspectos humanos y sociales, crear una mayor conexión con el cuerpo y provocar una real incorporación de las herramientas informáticas y electrónicas. Por lo tanto, y más que nunca, la metodología de estudio partirá de un fuerte conocimiento de uno mismo, de los propios intereses, de las distintas formas de abordar los temas académicos y de cuáles son acordes a las distintas personalidades. En síntesis, crear un método de estudio propio, que parta de cada uno y que resulte eficiente en calidad y rendimiento. Para ello será necesario trabajar el concepto de auto organización, administración de tiempo y establecimiento de prioridades según las distintas áreas de aprendizaje, el trabajo corporal y el abordaje de las emociones vinculadas a lo social y personal que bloquean el proceso de aprendizaje. De esta manera se vincula el concepto de conexión con el aprender que incluye los aspectos emocionales además de los cognitivos, con la importancia de adquirir un método de estudio que facilite dicha conexión.